Advertisement

Las apuestas ilegales golpean el corazón de la NBA: 34 detenidos, entre ellos el entrenador de Portland y el base de los Miami Heat

Los agentes han arrestado este jueves a 34 personas supuestamente vinculadas con una trama de juego y póquer ilegal.

El entrenador de los Trail Blazers y miembro del Salón de la Fama de la NBA, Chauncey Billups, y el base del Miami Heat, Terry Rozier, han sido arrestados por el FBI por su presunta implicación en una compleja investigación federal sobre apuestas deportivas ilegales y juegos de póquer manipulados relacionados con el crimen organizado, según ha adelantado el canal deportivo ESPN.

Las detenciones de Billups y Rozier son solo la punta del iceberg de una operación que ha golpeado el corazón de la NBA y en la que han sido arrestadas 34 personas en total. La investigación tiene tintes de una película de la mafia tras una compleja investigación que se ha prolongado durante años en una acción coordinada por el FBI en 11 estados de Estados Unidos. La trama de juego ilegal han movido decenas de millones de dólares, según ha declarado este jueves, Kash Patel, director del FBI, durante una conferencia de prensa en Brooklyn (Nueva York). “Hemos desmontado una trama de fraude en la que participaban cuatro familias de la Cosa Nostra”, ha detallado Patel. “Los Bonanno, Gambini, Genovese y Lucchese”, ha remarcado el director del FBI como si fuera una película de Scorsese.

Patel, quien ha comparecido rodeado de otros agentes que han participado en la investigación, ha precisado que el fraude es abrumador: “Estamos hablando de decenas de millones de dólares en robo, fraude y hurto”.

El fiscal estadounidense del Distrito Este de Nueva York, Joseph Nocella Jr., ha calificado la trama corrupta como “uno de los esquemas de corrupción deportiva más descarados desde que las apuestas deportivas en línea se legalizaron ampliamente en los Estados Unidos”.

El jugador de los Heat, Terry Rozier, y otros acusados ​​“tenían acceso a información privada conocida por los jugadores o entrenadores de la NBA” que supuestamente condicionaba el resultado de los partidos o la actuación de algunos jugadores. Los implicados facilitaban esa información a otros miembros de la red criminal a cambio de una parte de las ganancias de las apuestas