Hillsboro, Oregón – Si alguna vez hubo dudas sobre si Druw Jones heredó más que el apellido de su legendario padre Andruw Jones, el martes por la noche se disiparon todas en un instante espectacular. En un duelo de Clase-A Fuerte entre Hillsboro Hops y los Eugene Emeralds, el joven prospecto de los Arizona Diamondbacks hizo una jugada que hizo eco al legado de su familia… y al logo de una leyenda del básquet.
Corría la tercera entrada en el Hillsboro Ballpark cuando James Tibbs, prospecto número 4 de los Giants, conectó lo que parecía ser un cuadrangular seguro por todo el jardín central. Pero en el último instante, Jones escaló la barda, se impulsó con un salto digno del logo Jumpman de Air Jordan, y robó el jonrón en el aire, dejando boquiabiertos a todos en el estadio.
El jardinero de 21 años, segunda selección global del Draft 2022, celebró la jugada con una sonrisa radiante, saludando con su gorra al lanzador mexicano Daniel Núñez y abrazando al dominicano Ángel Ortiz, su compañero en los jardines. No fue solo una gran atrapada, fue una declaración: el ADN defensivo de los Jones está intacto.
Esta no es la primera vez que Druw muestra su capacidad sobrenatural para cubrir terreno. Ya en su debut profesional fue protagonista de una atrapada por encima del hombro con una sola mano. Y aunque aún está lejos de igualar las proezas de su padre —10 veces ganador del Guante de Oro—, el joven Jones está armando poco a poco su propio repertorio de momentos inolvidables.
Más que una jugada para la galería, fue un recordatorio de que hay talentos que no solo se heredan… se perfeccionan.
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